domingo, 25 de diciembre de 2011

Chang

Aprendí el significado de esta palabra apenas pise Thailandia. Viajamos de la frontera con Laos a Chang Mai (la segunda ciudad mas grande de Thailandia que queda en el norte) en una combi. El amoroso del conductor de la van se llamaba Chang… al igual que la mitad de los thais que conocí hasta ahora y que la ciudad a la que estábamos yendo.

Chang significa Elefante.


Hasta hace una semana no había visto un solo elefante en mi vida, ni en el zoológico… hoy creo que ya van como 30 los que me cruce. Y vinimos a la ciudad de los elefantes especialmente para hacer un trekking de dos días en la selva. Nos organizamos entre amigos y sacamos todos el Tour en la misma agencia. Una vez más confirmo que la gente hace al Tour, si te toca un grupo de personajes como los que estuvieron con nosotras, no hay forma de pasarla mal.


Arrancamos bien temprano a la mañana en una camioneta, con mochila cargada con lo justo (por lo menos eso creíamos hasta ese momento).
Primer parada: museo de las mariposas… vimos solo una. Todos dudando de si el Tour era lo que esperábamos o si una vez mas como pasa seguido en Asia nos habían cagado con lo que nos vendieron.
Segunda parada: el pueblo de las mujeres con cuello de jirafa. Fue mas que nada un entrar, sacar fotos y salir.


Tercer parada: LA SELVA! Si si, estilo selva de Tarzán…. Lost…Expedición Robinson… y arranco el trekking propiamente dicho. Supuestamente nos habían contado en la agencia que era 1 hs de caminata en una planicie y por lo tanto ir con las Hawaianas que eran nuestro único calzado no estaba para nada mal. Pero por favor!!! Claro que estaba mal. A quien se le ocurre hacer un trekking en Hawaianas y llevando mas abrigo en una bolsa de basura gigante colgando de la mano????
Esas éramos nosotras tres. Con poca pinta de escaladoras pero con mucha buena onda para llegar a destino.
Después de 3 hs de caminata en subida, con taquicardia y trombosis de vena profunda, llegamos a las choza donde íbamos a dormir a la noche. Comimos el famoso phad thai y estiramos el momento de irnos a dormir por miedo a enfrentar a la millonada insectos que nos esperaban en la cama/piso.
Nos sentamos alrededor del fogón, cada uno se presento, cantamos acompañados de la guitarra del guía, charlamos, nos reímos y aprendimos a contar en coreano: tu, mi, yo, sin, los… o algo así.
A las 12 ya era hora de irnos a dormir. Las tres pegaditas, con linterna en mano para chequear cada dos minutos si lo que sentíamos que caminaba era una arana, escorpión o algún insecto desconocido. En total debemos haber dormido dos horas, no más.



Al día siguiente hicimos 1 hora de trekking en bajada. Para muchos peor que la subida. Para mi no!!! Pero bajar con esas hojotas me dejo la unión del dedo gordo y el siguiente destruida.
Al mediodía llegamos al camping de elefantes. Increíble! Son gigantes. Supongo que todos ya saben eso pero subirse arriba del elefante te da una idea mejor de cuan enormes son.

Pachi con su amigo Collin, que pobrecito quedo sordo de todo lo que grito. Nanin y yo juntas en el más viejito y vago. Hicimos unos 30 minutos de elefante y después rafting. Con buena pinta de profesionales metimos paddle paddle, faster faster por los rápidos de Chang Mai. Y así terminado el trekking volvimos a la city.




Dos días mas de recorrida por la ciudad, compras en el mercado, salidas nocturnas y la despedida de Nanita.



A Chang Mai le dimos todo (todo el físico!!!) y nos devolvió mucho… una banda de amigos que van a quedar siempre en el recuerdo.

Los despedimos con un deseo de Navidad....

domingo, 11 de diciembre de 2011

HOP CHAI LA LAI

Esta vez no van a leer a ninguna de las dos entusiastas relatistas que vienen alegrando y divirtiendo sus días con aventuras del otro lado del mundo desde hace meses: Pachi y Angu….
Hoy me dieron la difícil tarea y el privilegio de escribir nuestras vivencias en LAOS (donde me les uní al viaje por unos 12 dias) a mi. “La realidad es que” (y como extrañaba esa expresión) ya que cruzaba el charco, no podía dejar de venir a visitar a mi amiguita del alma.  Y disfrutar de unos días de viaje conociendo el mundo con ella. Siempre había sido un sueño viajar juntas y hoy lo cumplimos….

Me presento: soy Nanin: Amiga del colegio de Angu (para la flia de Pachi que no me conoce) aunque yo en 6 días de estar con ella ya siento que los conozco a todos: Cacho, Clari, Pia, Maria Sara, Chuli (que dejo de fumar), Atu, Bernardita (que no quiso bailar en el acto de fin de año)  y el abuelo….

Llegue el 6 de dic. al aeropuerto de Vantiene (capital de Laos) con unas indicaciones de calles con nombres raros donde estaba ubicado el hostel donde me esperaban las chicas que venían de Vietnam…sin dudar y sin compañía ya que venia sola me tome un taxi que me cobro de oro pero era la opción mas directa para encontrarlas rápido. Venia de dos días de viaje desde Europa con parada en KualaLumpur y no aguantaba mas las ganas de verlas! Apenas las vi sentaditas afuera del hostel abrí la puerta del auto en movimiento todavía y empecé a gritar como una loca. Angu me vio, vino a abrazarme y nos pusimos a saltar y gritar (la gente alrededor no paraba de mirar a las dos extranjeras que parecían estar de la cabeza).
Después de ponernos al día con todos los chismes desde argentina decidimos tomarnos un bus hasta Vang Vieng. Nuestro primer destino en Laos ya que la capital no tiene nada de lindo para mirar.
Vale aclarar que en el Bondi (referirse al apartado especial de bondis en Asia que escribieron en algún momento las chicas) no paramos de hablar y la gente ya nos miraba con caras amenazadoras..pero poco nos importaba. Había que ponerse al día con chismes del viaje y de argentina…..como esta el casorio de jo, Angus, maru, agus? Como andan todas…..?bla bla bla….

Llegamos. Vang Vieng es un pueblito aparte y distinto a lo que pudiéramos imaginar de un país como Laos.

Primero les cuento un poco de Laos para que se pongan a tono: El país es increíblemente montañoso *parecen los morros de Brasil, con palmeras, con el Mekong delta que lo atraviesa, un paisaje imponente por donde lo mires. Y así como es rico en naturaleza, al mismo tiempo es uno de los 20 países mas pobres del mundo, por lo que en sus rutas se pueden ver las casitas hechas de paja, la gente cuyo medio de transporte ppal es la bici yendo de aca para allá, llenos de tierra que van tirando los buses y camiones que pasan junto a la ruta. Es una cuidad construida al lado del camino…..un peligro para los chiquitos que caminan y deambulan por ahí mientras los autos pasan a grandes velocidades….se bañan también al costado del camino con el agua que sale de una canaleta o nose bien de donde….muchos chicos, muchas mujeres…pero, al contrario de lo que lo que las chicas vivieron en Vietnam…la gente es muy amable y súper servicial. Siempre con una sonrisa en la cara.  La felicidad que trae el no necesitar tantas cosas, que a veces nosotras no sabemos encontrar porque cada vez necesitamos de mas…..

Con este panorama muy amplio, ahora puedo hablar un poco de Vang Vieng. Es un pueblito en el medio de la nada donde a alguien se le ocurrió muy inteligentemente la manera de hacer un poco de plata del turismo. La diversión para los turistas consiste en unos bares construidos al lado del rio…bar I, bar II, bar III a los cuales vas en los famosos tuk tuks no sin antes alquilar unos “tubbings” (grandes cámaras de ruedas de camión) para ir flotando río abajo durante todo el día y que te “pesquen” de los diferentes bares y te inviten a tomar algo. La entrada a los bares es un trago de wisky con el cual te ganas una pulserita para subir al bar. Estas un rato y seguis al siguiente bar. Cada uno tiene su atracción. Ahí te podes unir a la gente que sigue las canciones a todo volumen bailando como si fueran las 12 de la noche, bajo el rayo del sol a las 12 del medio día…… Cada loco con su tema, bailando, flotando, siendo pescado….dibujándose los brazos con aerosol….tirandose de la tirolesa, de un trampolín al agua….un lugar puramente de joda. Muy divertido.  Y en este lugar afirmamos lo que Mela nos dijo con el regalo de una remera “la gente esta muy loca”. Para conocer una vez en la vida y no quedarse mucho tiempo porque te agota y salis si o si necesitando un higado nuevo!!!

De ahi con mucho cansancio en el cuerpo pero con una sonrisa en la cara partimos para Luang Prabang. El viaje a Luang Prabang en una mini van es algo increíblemente lindo, camino montañoso que sube, baja, curva, curva…pero que provoca bastante nausea cuando el chofer no baja la velocidad de 100 kms x hr…termino siendo de terror cuando la mitad de los pasajeros empezaron a abrir las ventanas para vomitar y el culmine fue cuando una chinita (que hablaba el mismo idioma del chofer y le podría haber pedido que pare, hdp) se vomito encima a medio milímetro de mi asiento…imagínense el resto. Yo no lo quiero recordar…..pero por suerte llegamos con vida y sin muchos más perjuicios a Luang Prabang….un pueblo demasiado lindo…

Templos, restaurantitos muy lindos decorados al estilo asiático, book shops, casitas de masajes características de Asia….un pueblito al lado del rio que valía la pena conocer. Nos alquilamos unas bicis y lo recorrimos todo motorizadas. Ya alas 5 de la tarde agotadas decidimos darnos unos oil masaje…lo teniamo merecido después de tanto ejercicio y después encaramos para el night market de la plaza ppal. Se nos salían los ojos de todo lo que había. Yo cai a Laos con una valijita minúscula, pero nose como termine comprando anillos, bufandas, polleras, botellitas para fumar opio (de decoración, pero para que vean hasta que punto compramos cosas innecesarias pero muy lindas)….

Y porque no, terminar la noche en un buffet del lugar compartiendo mesas con gente local. Cada uno se servia lo que mas le tentaba de unos grandes bowls con fideos, path thai, vegetales…etc bien expuestos para que todos apreciáramos. Y de ahí, con panza llena, como todo cierra tempranito, partimos a un Bowling que antiguos viajeros nos habían recomendado. Se ve que acá en Laos se usa hacer estas cosas para turistas tipo los tubbings o el Bowling, donde todos vamos, no entendemos que hacemos ahí…en medio de Asia preocupados por si hacemos un strike o se cae solo uno de los bolos…..pero asi fue como terminamos la noche compartida con otros dos argentinos amigos de las chicas de New Zeland…..2 partidas de bowling y a la camita….

Bueno, creo que me extendí…
Ahora estamos en un slow boat camino a Chang Mai (Thailandia). Ya mañana dejamos Laos y llegamos a Thai a experimentar con elefantes y mas lugares increíbles.

Como diríamos acá en Laos, les digo a las chicas cantando: HOP CHAI LA LAI (gracias) por recibirme en su viaje por el mundo….de corazón. La estoy pasando muy, muuuy bien. Feliz de compartir esta experiencia con las dos.

Y como dijo alguien a quien quiero mucho mucho seguimos “using our eyes to see different things, broadening our minds and by doing this, sharpening our hearts and our sensibility. In one word we continue TRAVELING…..

Hasta maniana…. les debemos las fotos!

lunes, 5 de diciembre de 2011

Vietnam con H…

Con H de Hoi An y Hue, dos ciudades al norte de Ho Chi Minh que sumamos a la lista de viaje. Paso a contarles.

Salimos de Cambodia con un buen bronce y bien relajadas encarando la locura de Vietnam. Hicimos tres noches seguidas “durmiendo” en los famosos sleeping buses para llegar a Hoi An, un lugar que nos devolvió un poco la sonrisa a la cara. Veníamos con mala racha de vivencias, muchos líos con los bondis, mucho vietnamita mala onda y mucha mucha gente con motos en las calles que nos tenían apabulladas… pero por suerte llegamos a este pueblo antiguo que tiene mucho encanto. Esta completamente preservando, así que se puede ver lo que era Vietnam antes de la guerra.




Es Tailor Land, calles repletas de telas, costureras y zapateros que hacen lo que le pidas a medida. Por supuesto que no podíamos dejar pasar la experiencia de diseñarnos nuestros propios vestidos y zapatos, así que lo primero que hicimos fue ir directo al local de una señora amorosa a que nos hiciera no solo 1 vestido, sino que 3 a cada una!!! Y por que no, unas sandalias en el local de al lado.
Pachi relatando en ingles lo que quería, la vietnamita anotando lo que entendía… resultado: unos vestidos que son para disfraz más que para otra cosa. Pero nos divertimos mucho!!! Yo me hice un vestido que quedo bueno, otro que parece el de Blanca Nieves y unos pantalones que pueden ser usables. Las sandalias quedaron divinas!!!




Y Hoi An tiene muchas callecitas por recorrer con casitas super pintorescas con influencia china. El segundo día sacamos las bicis gratis del hotel, un poco destartaladas pero hacían su trabajo de transportarnos y nos fuimos pedaleando al pueblo. Con lluvia de por medio y unos pilotines que tuvimos que regatear porque sino nos pedían 5 usd por cada uno (pagamos 50 centavos!) paseamos hasta la tardecita. Después nos fuimos a relajar al hotel y devuelta al pueblo para comer y mirar la ciudad iluminada de noche.


Al día siguiente nos fuimos a Hue, solo a 4 hs de Hoi An, mas que nada porque desde ahí nos tomábamos el bondi que nos llevaba a Laos. Estuvimos un día entero caminando por la ciudad. Hue es el lugar donde vivían los reyes vietnamitas de la dinastía Nguyen. Hay una gran muralla que separa a la ciudad de la zona donde todavía siguen muchos de los templos donde vivían, casi como un Toledo pero en Asia.




Y ya nos despedimos de Vietnam! Ahora escribo desde Laos, ya habiendo cruzado la frontera sin ningún problema pero con la incertidumbre de si llegaremos a donde planeamos llegar o si nos van a tirar en cualquier pueblo del camino. Somos las dos únicas “Westerns” en un bondi de lujo, repleto de locales. Una vez mas hago referencia a lo difícil que es manejarse con semejante barrera idiomática.

Vietnam no me dio lo que venia a buscar… quizás estuve mal en llenarme de expectativas. Me voy contenta de haber conocido un país mas, y de tener hoy mi propia opinión basada en una vivencia y no en un cuento o una linda foto.

Si esto aparece publicado en el blog es porque llegamos sanas y salvas a algún destino con civilización e internet!

Próximamente entrada exclusiva relatando las experiencias en los sleeping buses (merece cuento aparte).

jueves, 1 de diciembre de 2011

Cambodia, un lugar diferente

Luego de la agobiante Ho Chi Min City, partimos a Cambodia.
Ya apenas cruzamos la frontera, nos empezó a fascinar. Me pareció igual a lo que me imaginaba, había leído dos libros el año pasado del regimen de Khmer Rouge que destrozo al país y mato a millones. Es tan desolado como desolador lo que se ve. Casas que son chozas de paja, chiquitos desnudos, la gente sentada ahí haciendo nada, todo venido muy a menos. Toda esta pobreza le da cierto encanto.
Con Angie nos propusimos que al llegar a cada país a una le toca contarle la historia a la otra para así saber y entender un poco mas de la gente y su cultura. Lo interesante de Cambodia, es que no hace muchos años que paso por esta guerra civil y que como resultado deja un población del mas del 50% menor a 22 años, muchos huérfanos, y mucha gente con partes de su cuerpo mutilados, pobreza extrema y muchísima prostitucion. Bastante impresionante.

Pero acá mejor relatar lo lindo. Primer parada fue Siem Reap, pueblo que queda cerca de las ruinas de Angkor Wat. El viaje hasta ahí muy lindo, buenas vistas y empezamos a conocer nuevos personajes que quedaran en la historia: un australiano totalmente negativo, todo es una mierda salvo Australia (un imbecil) y 3 griegos que viajaban por 3 semanas y que tenían todo perfectamente planeado, tan a mil que hasta un día ni pararon a comer. Agotador. Es genial los personajes variados que se van conociendo a través del viaje.




Para ir a las ruinas, nos levantamos a las 4 30 AM así veíamos el amanecer, y valió la pena, muy imponente. Teníamos nuestro tuk tuk que nos iba llevando a las distintas ruinas. Creo que fuimos las personas que hicieron Angkor Wat en tiempo record. Nuestro tuk tukero feliz porque gano los dólares más rápidos de su vida. Nos habían dicho es ideal ve el atardecer también. Pero ya a las 11 de la mañana con un sol que te quema la piel y la humedad que te ahoga, empezas a ver difuso y todas las piedras resultan iguales. Tentadas de la situación, decidimos terminar de ver lo que nos quedaba y retirarnos al amparo del viento generado por el tuk tuk. Concluimos que te tiene que fascinar la fotografía o ser arqueólogo para estar un día completo ahí.
Siem Reap, el pueblo nos encanto, hay un mercado que es divino y unos lugarcitos para comer que son un amor, y la comida camboyana es deli! Y nos hicimos nuestro primer body massage, buenisimo!



En esos días fuimos a la floating village que queda cerca de Siem Reap. Una mini ciudad flotante donde la gente vive, y hay colegio, iglesia, markets, de todo. Lo impresionante es que la gente toma el agua de ahí, se baña con esa agua, y a la vez hace sus necesidades en esa mismísima agua. Un horror. Nos ofrecieron ir a ver el colegio, pero antes teníamos que parar a comprar algo de comida que se lleva, sino no podes entrar. Las dos por supuesto que dijimos bueno vamos, no nos cuesta nada, razonamos que una buena cantidad de paquetes de noodles debería costarnos máximo 5 dólares, nos deja el barquito en el mini market flotante y nos quería cobrar 25 dólares, indignadas nos retiramos y las puertas del colegio quedaron cerradas para nosotras dos. En el super salen nada y que te quieran cagar por ser turista nos embola.



Después de unos días ahí,  decidimos ir a relajarnos a una playa llamada Sihanouk ville, al sur de Cambodia. Originalmente nuestro plan era volver a Vietnam e ir hasta el norte. Pero como todo lo íbamos a tener que hacer muy rápido decidimos ir a disfrutar unos días a la playita, sin correr demasiado. Que placer que fue! Nos quedamos 6 días, pegamos nuestro primer gran bronceado asiático y nos relejamos. Mucho licuadito y cervecita disfrutando de los grandes atardeceres sobre la playa camboyana.


Lo que nos resulto apabullante es la cantidad de gente que te ofrece cosas o te pide. “Madam, do u nid somesing?”  “Tuk tuk mis? 2 dolars!” “ Plis buy” y les decís que no y te dicen Why? Porque no quiero che, dejame de hinchar. Llegan un momento que ya te dejan de dar pena y te agotan. Bastaaaaa no quiero nadaaaa!!!

Más allá de esto las dos quedamos copadas con Cambodia. Es muy lindo, muy distinto, la gente mas allá que a veces abrume, es un amor.

Palabras aprendidas en Khmer:
Ocun – Gracias

Y nada mas, es muy difícil!